Mesas refrigeradas de uso profesional para Hostelería

Frío Canto
8 ene 2020
7 Min. de lectura

Las mesas refrigeradas son un producto enormemente útil en Hostelería.

Además de ofrecer la funcionalidad obvia de la congelación, te permitirán utilizarlas como mesas de trabajo.

De esta manera, al adquirir este tipo de maquinaria de hostelería, estarás invirtiendo en practicidad y espacio, ganando superficie de trabajo para su negocio.

Qué es una mesa refrigeradora

Una mesa refrigeradora es un tipo de mueble y maquinaria a un tiempo, que incluye estantes interiores y que está refrigerada.

Existen mesas frías por refrigeración (frío positivo) y de congelación (frío negativo), variando la temperatura interior en función del producto que deban conservar.

Suelen estar fabricadas en acero inoxidable, normalmente en sintonía con la estética del local de restauración.

El estar hechas en este material implica siempre mayor higiene. Su limpieza es más fácil y eficaz, puesto que la suciedad se puede ver fácilmente.

Además hay mesas refrigeradas con fregadero incorporado.

Habitualmente cuentan con puertas opacas, aunque existen modelos con puertas de doble cristal.

Mediante este tipo de estos mostradores se consigue que la durabilidad de los alimentos se prolongue durante mucho más tiempo.

En su interior se puede llegar a guardar una gran cantidad de producto fresco y terminado, sin necesidad de molestos desplazamientos a la cocina o a otras zonas del negocio.

Permiten una doble función: refrigerar los alimentos y trabajar sobre ellas, lo que supone un gran ahorro de espacio.

Cómo usarla

Existe una gran variedad de mesas refrigerada con muy diferentes formatos que te permitirán los más diversos usos:

De cara al público: mesas con vitrinas que dan además la posibilidad de autoservicio.Mesas para cocina: centrales, con la posibilidad de trabajar en su superficie con materiales frescos almacenados debajo de los que se puede disponer sin apenas moverse.Mesas situadas contra la pared, de tipo mural para complementar con estanterías situadas encima.Frente a la barra, también llamadas “frente mostrador”, que sirven para trabajar dentro de la barra del bar.Para soporte de otras máquinas, como cafeteras, molinillos de café, zumeras, etc…Mesas refrigeradas bajo mostrador, para trabajar sobre ellas.

Los usos más habituales de una mesa refrigerada son como encimera: como mesa de trabajo, de soporte, con cubetas, como vitrina, con fregadero, etc...

Si andas corto de espacio para elaborar alimentos te recomendamos una encimera de trabajo, con un alto estándar de 85 cm ideal para la comodidad de los trabajadores. Las hay de tipo Central o Isla, con acceso 360°, o bien de tipo mural, para ubicar contra la pared y de acceso frontal únicamente.

Las mesas de tipo Frente Mostrador, se ubican también contra la pared pero, como su nombre indica, se utilizan en la zona de atención al público, frente a la barra.

Si en cambio precisas un espacio de almacenaje refrigerado debajo de la barra, te recomendamos que optes por las mesas bajas.

Las encimeras de soporte tienen un alto reducido a 60 cm, dado que sirven para disponer maquinaria sobre la mesa.

En qué negocios de Hostelería se utilizan las Mesas Refrigeradas

Las mesas frías te permitirán ofrecer a tus clientes productos en excelentes condiciones de almacenamiento y a la vista.

Las mesas de este tipo son cada vez más frecuentes, por la gran popularidad que están teniendo los negocios en los que el cliente puede elegir los ingredientes; por ejemplo, los bocadillos al gusto.

Ten en cuenta, además, que cada vez son más populares los negocios que ofrecen buffet libre o que ofrecen platos más sanos, una preocupación cada vez más presente entre ciertos sectores de la Hostelería y la restauración.

Una de las grandes ventajas de este tipo de mesas frías para buffet o para ensaladas es que permiten el autoservicio, que no sólo es muy bien aceptado entre los clientes, sino que también te ahorran el tener que contratar más personal.

Puedes utilizar una mesa de frío en tu bar o restaurante para mantener la temperatura de aquellos productos que requieran refrigeración, como es el caso de algunas bebidas, lácteos y determinados productos como salsas, así como para utilizar su superficie como mesa de trabajo.

Son de gran utilidad en la barra para la elaboración de productos al momento sin tener que desplazarse a la cocina.

También son muy recurrentes a la hora de preparar complejas ensaladas de ingredientes diversos, ya que, mediante un sistema de cubetas Gastronorm G/N, puedes tener todos los componentes a mano perfectamente ordenados, aunque los hayas preparados previamente.

Lo mismo sucede con la elaboración de pizzas, sándwiches o kebabs. Tenemos modelos recomendados para la preparación de alimentos que requieren varios elementos.

Las mesas refrigeradas pueden ser útiles también en pastelerías y bollerías, bien para la fabricación de los productos, con ingredientes que deben estar siempre fríos, bien para servirlos al público a temperatura ambiente.

Algunos modelos incluyen vitrina elevada con protección de cristal, que permite ser usada de cara al público.

Evidentemente las cocinas son recintos de trabajo en Hostelería en lo que las mesas refrigeradas prestan una ayuda considerable al cocinero a la hora de un mayor aprovechamiento del espacio de trabajo.

Características

A la hora de elegir una Mesa Refrigerada para tu negocio de Hostelería, ten en cuenta esta serie de datos. Te ayudarán a escoger la más adecuada:

Dimensiones

Una recomendación esencial es que primero tomes las medidas del espacio disponible en tu local con la mayor exactitud posible. De este modo estarás en condiciones de seleccionar el modelo que mejor se adecua en ancho, fondo y alto.

En cuestión de dimensiones, nuestra oferta es muy extensa.

Tenemos mesas de frío con los siguientes rangos de dimensiones:

Ancho: Desde 64,5 cm a 254,2 cm.

Fondo: Desde 60 cm a 80 cm.

Alto: Desde 60 cm a 110 cm.

Ten en cuenta que algunos modelos ofrecen pies regulables para poder variar el alto de las mesas en función de tus intereses.

Almacenaje

También en este caso es conveniente tener primero clara la función a la que va a ir destinada tu mesa refrigerada, a fin poder calcular el máximo de alimentos vas a enfriar y guardar en ella.

En esta sección disponemos para ti de una amplia gama de mesas refrigeradas con una capacidad situada entre los 75 y los 845 litros.

El almacenaje con puertas se organiza por estantes y también hay mesas refrigeradas con cajones.

También se incluyen dentro de la mesa parrillas de alambre de acero plastificado, desmontables y que permiten regular la altura de las estanterías adecuándola a tus necesidades.

El interior del área de almacenaje de los modelos más funcionales cuenta con uniones curvas y estantes con varillas plastificadas desmontables para facilitar la limpieza.

Las puertas

Puedes acceder a tus productos a través de cajones o puertas. De esta manera encontrarás mesas con 2, 3 u 8 cajones y de 2 a 5 puertas.

Estas puertas pueden ser:

De acero inoxidable o cristal Con o sin iluminación.

Con o sin tirador.

Con o sin sistema de retorno automático.

Con o sin sistema de fijación de apertura.

Contrapuertas embutidas en acero inoxidable con burletes para aumentar la capacidad de aislamiento.

Capacidad de refrigeración: potencia del motor y aislamiento

En nuestra sección contamos con equipos cuya potencia se sitúa entre los 350 y 615 W.

Los equipos se regulan mediante un cuadro de mandos, que puede ser digital-electrónico, con o sin visor digital.

La temperatura que manejan estas mesas varía entre –2 ºC y + 8 ºC .

En algunos modelos el refrigerante es ecológico, libre de CFC.

No sólo la capacidad de enfriamiento es importante. También el aislamiento para mantener los valores de la temperatura deseada.

A este respecto la mayoría de las mesas refrigeradas cuentan con aislamiento de poliuretano inyectado, con paneles exteriores en acero inoxidable.

Encimeras con Cubetas GN

Mucha de estas mesas refrigeradoras proveen espacios de almacenamiento estandarizados para bandejas Gastronorm en sus modelos específicos 1/1, 1/2, 1/3 o 2/3.

También es pertinente que tengas que cuenta cual es la medida de la cubeta que te conviene en función de la cantidad y el tamaño de la comida que vayas a alojar en ella.

Compón tus espacios de trabajo con mesas específicas para la producción de pizzas, kebabs o ensaladas incorporando bandejas GN.

Solo tienes que situar en ellas los ingredientes de uso más frecuente, para así poder producir con más agilidad y comodidad, manteniendo siempre la frescura y seguridad alimentaria.

Las mesas refrigeradas que utilizan este tipo de cubetas requieren de un fondo mayor, ya que precisan más espacio tanto para la organización de los ingredientes, como para la elaboración. El fondo útil suele situarse entre los 60 y los 80 cm.

Las cubetas y bandejas Gastronorm se venden por separado y contamos con una gran variedad de marcas y modelos.

Funciones extra y accesorios

Existen además encimeras que llevan un fregadero incorporado, mesas abatidoras y se pueden adquirir bajo pedido encimeras de granito.

Consejos para un correcto empleo

A pesar de que, a priori, el funcionamiento de las mesas refrigeradas es muy sencillo, estos consejos te serán útiles para prolongar el buen rendimiento y la vida útil de tu máquina

No cargues exageradamente tu mesa refrigerada: A veces es mucho más rentable comprar varias mesas refrigeradoras que exponer las que tengas a una sobrecarga de alimentos. Puede pasarte como sucede con los frigoríficos domésticos: no solo vas a perjudicar el funcionamiento de la máquina, sino que vas a poner en riesgo el congelamiento de los insumos.

Ten cuidado de no obstruir las bocas de impulsión y retorno de aire frío: Este es un error que se suele cometer al colocamos los productos dentro de la mesa refrigeradora. Debes tener en cuenta el tamaño de los alimentos para que, al colocarlos, no obturen la boca de impulsión de la mesa frigorífica.

Limpia con regularidad el condensador: Hay productos como líquidos que se derraman y sólidos que dejan residuos que pueden provocar mal olor. Por eso es necesario hacer de vez en cuando una limpieza a fondo de tu mesa de frío. Especialmente debes mantener limpias las superficies del tubo del condensador refrigerado por aire o de la unidad de ventilación. Si no lo haces el funcionamiento de la mesa podría resentirse.

No añadas otros accesorios ajenos al de tu mesa refrigerada: Adapta o mejora tu máquina exclusivamente con los accesorios de fábrica o que te recomienda el fabricante.

Verifica las condiciones de instalación de tu mesa refrigerada: Procura que tu mesa refrigeradora esté en un lugar bien ventilado y que no le afecte la temperatura en las épocas de mayor calor, así como que la instalación propiamente dicha esté bien realizada. Ojo con cables sueltos o deteriorados.

No dejes de realizar cada cierto tiempo un mantenimiento preventivo y correctivo: Es la mejor manera de evitar inconvenientes o fallos inesperados.

La mesa más vendida es:

Mesa Refrigerada Infrico Serie 600 BMPP Cristal